Solo basta con tener la convicción de que puedes lograr algo para hacerlo posible, aprender y abrir nuevas oportunidades son parte de lo que todos tenemos derecho para desarrollarnos en cualquier área.
Con tan solo 23 años Lorena es una chica que además de continuar sus estudios en línea, decidió prepararse en repostería y descubrir sus dotes en el taller de gastronomía.
Su juventud es sinónimo de entusiasmo y responsabilidad que en definitiva la harán llegar muy lejos en cualquier ámbito de su vida, ella es una prueba más de que la actitud es un ingrediente esencial para salir adelante, sin postergar sus sueños.
